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miércoles, 29 de junio de 2011

LA FORMACIÓN DEL PENSAMIENTO FILÓSOFICO ISLÁMICO

LA FORMACIÓN DEL PENSAMIENTO FILÓSOFICO ISLÁMICO
por Mustafa Ali

www.islamenchile.com
1.1 Los orígenes del Islam


Hablar de los orígenes del Islam es remontarse a un tiempo en donde la ignorancia y la violencia era la tónica en la península arábica. El hurto, el saqueo, la usura, el juego, los secuestros, asesinatos y el vicio de la bebida estaban tan arraigados, que eran temas frecuentemente tratados en la poesía árabe. Por otra parte, las supersticiones que reinaban sobre su mundo espiritual, causaban el retraso de los árabes con respecto al resto de los pueblos. Entre dichas supersticiones podemos mencionar tres a modo de ejemplo: Uso del fuego para propiciar lluvias, la creencia en el uso curativo de las patas y hocicos de camellos, etc.


La situación social de Arabia en los tiempos pre-islámicos (Chaillía) estaba constituida por conglomerados tribales formados por la unión de un grupo de familias, bajo la jefatura de un líder. En dicha estructura social en donde no existía ningún de respeto por individuos de tribus ajenas, así como tampoco, ningún tipo de respeto entre los diversos clanes; los saqueos, los asesinatos, los secuestros de mujeres, etc.; eran derechos legales de cada tribu, privando la ley de la sangre, como único medio de justicia o compensación.


A este respecto Tomás Carlyle señala: “Con el Islam Dios oriento a los árabes desde la oscuridad hacia la luz. De un pueblo silencioso y estancado, que no tenia ni voz ni movimiento, creó un pueblo que paso del anonimato a la fama, del sueño al despertar, de la bajeza a la superioridad, de la debilidad a la fortaleza y cuta luz asombro a los cuatro puntos cardinales…” En la misma línea, el conocido historiador Massignon escribe: “Hasta el momento de este asombroso acontecimiento (la llegada del Islam) que nos presento a los árabes, ninguna de las partes de Arabia se encontraba entre las historias de las civilizaciones. Tampoco se observaban en ellos características científicas ni religiosas. Las diferentes tribus de Arabia no habían visto en sus mismas leyes o modales ninguna señal de civilización. Ellos habían estado privadas de los privilegios que brinda una sociedad y que origina avance y el progreso”.

Toda esa oscura realidad, cambio en la primera parte del siglo VII con la aparición de un poderoso mensaje de sometimiento al Dios Único y Verdadero.


El Mensajero



Muhammad Ibn Abdal-lah nació en la ciudad de la Meca en el 570 d.c.; en el clan más noble de la tribu que gobernaba a dicha ciudad, los Quraish . Una de las tribus árabes más poderosas de su tiempo, poseyendo el privilegio de gobernar en la Meca y ser los guardianes de la Ka´abah . Pese a pertenecer a la nobleza de los árabes, su clan era pobre, debido a que las riquezas de su abuelo habían menguado durante la última parte de su vida. Quedo huérfano de padre antes de nacer, quién falleció de una enfermedad cuando formaba parte de una caravana que había partido rumbo a Sham , y perdió a su madre Amina cuando sólo contaba con cuatro años, siendo a partir de entonces criado por su abuelo Abdul Muttalib y luego por su empobrecido tío paterno Abu Talib.


El joven Muhammad desde muy temprana edad debió buscarse medios para ayudar al sustento de su hogar adoptivo, siendo su principal actividad el pastoreo (actividad tradicional que han ejercido los profetas durante la historia; lo que lo mantuvo alejado de la corrupción de la sociedad de su tiempo); acompañando en algunas ocasiones a su tío en sus viajes. Fue en uno de estos viajes, cuando contaba aproximadamente con nueve años, que ocurrió un hecho que vendría a evidenciar a Abu Talib la persona especial de su joven sobrino. Dirigiéndose a Siria, la caravana se detuvo en Bostra cerca de una ermita habitada por un monje cristiano llamado Bahira que conocía las antiguas profecías acerca del advenimiento de un profeta de entre los árabes. Al conocer al niño Muhammad, el monje pudo advertir en su cara y cuerpo señales claras de la profecía registradas en los antiguos manuscritos a los cuales habría tenido acceso. Esto sumado al milagro de una misteriosa nube que seguía y protegía al niño del sol, lo convenció que estaba en frente del futuro profeta.


De vuelta ya en la Meca, sus tíos se preocuparon que el niño fuera adiestrado en el empleo de las armas y en el arte de la guerra. Recordemos que en aquella época eran frecuentes las luchas entre tribus y era vital para la sobreviviencia tanto individual como grupal la destreza en el uso del arco y la espada. No paso mucho tiempo para que el joven Muhammad tuviera que demostrar su valor y destrezas. Cuando contaba con tan solo 15 años participó en la batalla de Fuyyar, que se libró entre los Quraish y Hawazan.


Aproximadamente a los veinte años comenzó a acompañar con regularidad a sus parientes en sus viajes a tierras lejanas, siendo un día convocado a hacerse cargo de una caravana, cumpliendo dicho cometido con gran éxito, razón por la cual, comenzó a ser cada vez más solicitado. Su pericia en los negocios y el hecho de ser conocido en toda la Meca como "al-Amin", el Digno de confianza, el Honrado, el Honesto, llegando su fama a oídos de una rica mercader de nombre Jadiya ; quién con posterioridad se convertiría en su esposa, con quién tendría 6 hijos, dos varones y cuatro mujeres. El hijo mayor fue un niño llamado Qasim, y a Muhammad se le conoció como Abu-l-Qasim (el padre de Qasim); pero el niño murió antes de cumplir los dos años. El siguiente fue una niña, a la que llamaron Zaynab, que fue seguida de tres niñas más: Ruqayyah, Umm Kulthum y Fatima , y de otro hijo de corta vida llamado Abdullah igual que su padre.


A raíz de la precaria situación por la que atravesaba su tío Abu Talib y por la cual, le era imposible la manutención de sus hijos, Muhammad se encargo de la crianza de su sobrino ´Alî quién era de una edad similar a la Ruqayyah y Umm Kulthum.


Tenemos relatos que antes del inicio de su misión profética, sus virtudes espirituales fueron presentidas por hombres sabios, citaremos el ejemplo de uno de los sabios más afamado de su tiempo, Uaraqat Ibn Naufal, tío de Jadiya, quién solía decir que un hombre se levantaría de entre los árabes con el fin de orientar a los pueblos, y que contraería matrimonio con una mujer rica de su misma tribu, la de Quraish. También solía decirle a Jadiya: “Te casarás con el hombre más noble de la tierra”.


La Misión Profética.


La historia del Islam, se inicia el día en que Muhammad es designado Profeta; día que iniciará una serie de acontecimientos que con el tiempo, cambiarán la faz del mundo y la historia de la humanidad.


En el monte de Hirâ que se encuentra ubicada al norte de la Meca, es en donde el Profeta Muhammad (Bpd) cada año en el mes de Ramadán llevaba a cabo retiros espirituales en una pequeña cueva del tamaño aproximado de un hombre de estatura media. Fue en uno de esos retiros cuando contaba con 40 años, en una noche hacia finales de Ramadán , vino el ángel Yibrâil (Gabriel) en la forma de un hombre y le trasmitió la primera revelación .


“Lee”. Muhammad, que era iletrado, respondió: “No se leer”. Yibrâil reiteró “Lee”, obteniendo la misma respuesta: “No se leer”; esta escena se repitió por tercera vez mientras el ángel lo oprimía con un fuerte abrazo que le impedía a Muhammad respirar, entonces lo soltó y dijo:


¡Recita en el nombre de tu Señor, el que todo ha creado!
Ha creado al hombre de un coágulo.
¡Recita! Tu Señor es el más Generoso,
Él, que ha enseñado con el cálamo,
ha enseñado al hombre lo que éste no sabía.
(96:1-5)


Tras este suceso, Muhammad temió haber sido presa de los "yins", convirtiéndose en un poseso. Rápidamente, abandonó la cueva, corriendo cuesta abajo en la oscuridad de la noche y cuando ya había logrado recorrer la mitad de la ladera de la escuchó una voz que le decía: "¡Oh, Muhammad!, tú eres el mensajero de Dios y yo soy Yibrâil!". Al escuchar esto, levantó los ojos hacia el cielo y donde quiera que miraba se erguía la figura de ángel, quién le volvió a decir: "¡Oh, Muhammad!, tú eres el mensajero de Dios y yo soy Yibrâil!".


Cuando al fin, logro llegar a su hogar, le relato a su esposa los extraños hechos que habían ocurrido esa noche; ella después de tranquilizarlo, se dirigió a hablar con su tío Uaraqat, que era un Haanif anciano y ciego; el cual le confió que lo acontecido a su esposo era un mensaje del Dios Único: “Dice la verdad. El mensaje que recibió es el principio de su profecía”

El espíritu del Profeta se había iluminado con la Revelación y aguardaba la llegada de otro mensaje de su Señor; pero pasaron los días, meses y el ángel Yibrâil no aparecía. Hasta que cierto día, mientras el Profeta Muhammad (Bpd) se encontraba en la cueva de Hira, el ángel se le presentó y le reveló los siguientes versículos:


“¡Por la media mañana! ¡Y por la noche cuando se serena!”, que tu Señor no te ha abandonado ni te aborrece. Y sin duda que a otra vida será mejor para ti que la presente. Pronto te agraciará tu Señor de modo que te satisfaga. ¿Acaso no te hallo huérfano y te amparó, y te encontró extraviado y te encaminó, y te hallo necesitado y te enriqueció? Luego, en cuanto al huérfano, no lo maltrates, ni tampoco repulses al mendigo, pero divulga las mercedes de tu Señor.”
(93)



La convocatoria a la nueva fe, se produjo al principio en forma clandestina siendo los primeros convocados sus familiares , tras lo cual, luego de tres años de ocurridos los extraordinarios eventos en la cueva de Hirâ, el profeta Muhammad (Bpd) inició la proclama en forma pública, desde la cima de la colina Safa, desde donde exclamo: “¡Gentes! Si yo afirmará que detrás de esta colina se halla un ejército enemigo que quiere atacaros, ¿me creerían?. “Si", respondieron todos “porque jamás te oímos mentir”. Entonces continuó el Profeta: “¡Gentes! Sálvense del fuego (del infierno). No puedo hacer otra cosa más que advertiros”. Luego agregó: “Mi posición ante ustedes es igual a la de la persona que divisa al enemigo desde lejos. Y advierte a su pueblo de ello” .


El Corán


El Corán es la revelación divina trasmitida a Muhammad (570-632) a lo largo de 23 años; siendo la última de las escrituras Sagradas reveladas por Dios para guiar a la humanidad a lo largo de todas las épocas, de todas las culturas y civilizaciones.



El Corán fue revelado en forma árabe, forma que se ha mantenido integra en la lengua original en que fue revelado. Raúl González B nos señala que: “los eruditos del mundo islámico están de acuerdo en que el texto original árabe es absolutamente fiel a la palabra revelada y que no añade ni quita nada de ella”.



A lo largo de los siglos, son incontable el número de eruditos que han dedicado trabajos de exégesis sobre el Corán, cada cual desde su especialidad; no siendo estos trabajos una interpretación completa del Corán y de todo sus significados; sin que ninguna de ellas pueda agotar ni por asomo todas las enseñanzas que él encierra, ni interpretar. Pues sus niveles de lectura son infinitos y su comprensión esta relacionada con el grado de espiritualidad y erudición del lector.



El Corán está compuesto de 114 partes o capítulos de diferentes tamaños. Cada capítulo es llamado Sura en árabe y cada oración o frase del Corán es llamada aya, literalmente ‘señal’. Como la Biblia, el Corán está dividido en discretas unidades, referidas como versículos. Estos versículos no son de tamaños o métrica estándar, y donde comienzan o terminan, no fue decisión de los seres humanos, sino dictado por Dios. La más corta de las suras es de diez palabras, y la más larga, que se encuentra segunda en el texto, tiene 6.100 palabras. La primera sura, al-Fatihah (La apertura), es relativamente corta (veinticinco palabras). Desde la segunda sura en adelante, estas decrecen gradualmente en tamaño, aunque esta no es una regla fija. Las últimas sesenta suras tienen casi la misma extensión que la segunda. Una de las ayas más largas, es más extensa que muchas de las suras más cortas. Todas las suras, excepto una, comienzan con Bimillah hir-Rahman nir-Rahim ‘En el nombre de Dios, el más Clemente, el más Misericordioso’. Por último debemos mencionar, que el nombre de cada sura generalmente se menciona como tema dentro de esta.


Según los especialistas, el Corán ha tenido a través de la historia diferentes nombres a través de los cuales ha sido denominado. Abû Al Futûh Râzi ha mencionado cuarenta y tres nombres; mientras que Qâdî Abul Mu´alî encontró cincuenta y tres nombres; llegando el número de nombres del Corán según otros investigadores a ochenta. Pero por otra parte, otros investigadores sostienen que solo existe un nombre para el Corán.


Podemos dividir dichos títulos del Corán en nombres y atributos. De todos los títulos que se le han adjudicado al Corán, cuatro de estos, han sido mencionados en el mismo Corán como nombres de este.


a) Los nombres del Corán
Qu´rân (Corán) - Kitâb (Libro) - Dhirk (Recuerdo) - Furqân (Discernimiento)


Pero los tres títulos de Kitâb, Dhirk y Furqân han sido utilizados para llamar a otros libros Divinos, siendo el término Corán el único que ha sido utilizado como un nombre especial para referirse a este libro Divino en particular.


b) Los atributos del Corán
Mayîd (Glorioso) - Karîm (Noble) - Hakîm (Sapiente) - ´Adzîm (Majestuoso) - ´Azîz (Grandioso) - Mubârak (Bendito) - Mubîn (Lúcido) - Mutashâbih (Homogéneo) - Mazânî (Reiterativo) - ´Arabî (Árabigo) - Gaîra dhî ´iwayin (que no posee tortuosidad) - Dhî-dh Dhirk (Poseedor del Recuerdo) - Bashîr (Albriciador) - Nadhîr (Amonestador) - Qaîîm (Recto)


Debemos de mencionar otro nombre, que a pesar de no aparecer en el texto coránico, algunos investigadores sostienen que fue uno de los nombres más famosos y utilizados por los musulmanes y después de la muerte del Profeta (Bpd). Recordemos que durante la vida de este, no tenemos registros que se hubiera existido un nombre específico con el cual todos estén de acuerdo.



Citaremos las palabras del Dr. Râmîâr al respecto: “Cuando Abu Bakr recopiló el Corán, dijo a los discípulos del Profeta que le diese un nombre. Algunos quisieron llamarlo “Inyîl” (Evangelio) nombre que fue rechazado por los demás. Otro grupo propuso que lo llamaran “Sifr” (Pentateuco) propuesta que fue denegada. Por último ´Abdul-lah Ibn Ma´sûn, el destacado discípulo del Profeta (Bpd) propuso el nombre de Mus-haf , el cual fue aceptado y utilizado para referirse al Corán …”


A pesar de que existe consenso sobre el uso tras el fallecimiento del Profeta (Bpd) del término Mus-haf junto a otros fue utilizado para referirse al Corán; pero sin embargo, Qu´rân y Kitâb son nombres utilizados en varios hadices, razón por la cual, podemos decir que el término Corán se remonta a los tiempos del Profeta, y que fue el nombre por excelencia de la revelación divina.


La Sunnah


Podríamos definir la Sunnah como las costumbres, prácticas, usos y tradiciones, que derivan de la enseñanza profética, que engloba una amplia gama de aspectos de la vida del Profeta Muhammad (Bpd): conducta personal, su forma de ser, dichos, enseñanzas espirituales, orientaciones devocionales, explicación de las aleyas del Corán, etc.


La Sunnah es una de las dos fuentes de la doctrina y de la ley islámica; junto al Corán que es la fuente principal, estando ambas íntimamente ligadas. Esta Sunnah esta compilada en miles de tradiciones (hadîz), reunidas en numerosas obras, razón por la cual, las cuales pueden difieren en grado de confiabilidad; la cual depende principalmente del grado de “certeza y seguridad” de la transmisión. A raíz que la Sunnah es la segunda fuente en importancia del Islam, dicho tema no es menor. De dicha preocupación por la legitimidad de las miles de trasmisiones que han sido registradas, se creo una ciencia del hadîz (´Ilm mustalah al-hadîz), que se divide en varias ciencias complementarias, la más importante de ellas es el estudio de los narradores (´Ilm al-riyâl); que se centra en el isnâd , es decir, en la cadena de los nombres de las personas a través de las cuales se trasmitió el dicho profético; además de matn o el texto que es trasmitido en la narración; el cual es sometido un análisis en base al Corán y a los narraciones conocidas, el contexto histórico en que fue proferido y un minucioso análisis filológico, etc.


En base a dicha ciencia, los hadices pueden ser clasificados principalmente en :

1º Sahîh: Las tradiciones autenticas sin sombra de dudas.
2º Hasan: Las tradiciones seguras con algún tipo de defecto.
3º Da´îf: Las tradiciones poco confiables.


Hay una categoría especial de hadices en los cuales el Profeta (Bpd) trasmite palabras de Dios, que le fueron inspiradas de manera diversa a la revelación del Sagrado Corán, y que no forman parte de este último; se los llama hadîz qudsî (hadiz sagrado, tradición sagrada), las cuales poseen una importancia especial.


Sobre la historia del registro de los hadices hay un hecho que reviste importancia, y que suele ser omitido; que es el hecho que en los primeros tiempos del Islam existió una prohibición de la transmisión y narración de los hadices y por tanto de la Sunnah del Profeta; las motivaciones escapan a este pequeño bosquejo sobre la Sunnah ; pero dicha prohibición se mantuvo desde el primer califa al tercero, siendo abolida por el cuarto califa ´Alî Ibn Abî Tâlib, siendo restaurara por su sucesor y mantenida a lo largo de toda la dinastía Omeya, a excepción del califa Abdul-Aziz (El Justo), quién levanto la prohibición, aunque los califas que le sucedieron e algunas ocasiones volvieron a instalar dicha prohibición. Fue a partir de la dinastía Abasi, que dicha prohibición fue levantada en forma definitiva. A pesar de esto, hubo compañeros del Profeta que registraron tradiciones y las narraron en la clandestinidad.


De esta larga época en la cual estuvo vigente dicha prohibición (alrededor de 100 años), se infiltran en el Islam las tradiciones conocidas como israeliyias; término que designa a un grupo de narraciones provenientes de otras religiones monoteístas, tales como: formas de cristianismo, sabeismo, zoroastrismo y judaísmo. Reciben el nombre de Isra’iliyyât; debido a que la mayor parte de ellas, proviene de tradiciones de la Torah, que a través de algunos narradores conversos de dichas religiones se infiltraron en la sunnah.


De la gran cantidad de colecciones de Hadices, citaremos las colecciones más importantes y eje de las doctrinas y normas de las dos ramas del Islam.


En la rama del sunnismo tenemos seis colecciones consideradas Sahîh; las cuales son conocidas como Al-Sihâh Al-Sittah (Las seis compilaciones de tradiciones autenticas).

• Sahîh Al-Bujari. De Abû ‘Abdillah Muhammad ibn Isma‘îl Al-Bujâri (194-256 HL)

• Sahîh Muslim. De Abû Al-Husain, Muslim ibn Al-Haÿÿâÿ Al-Qushayri Al- Nisâbûri (204-261 HL)

• Sunan Abu Dawûd. Sulaymân ibn Al-Ash‘az Al-Azdi Al-Saÿistâni (202—275 HL).

• Sunan ibn Mâÿah. Abu ‘Abdillah, Muhammad ibn Yazîd Al-Raba‘i Al-Qazwini (209/-273 HL)

• Ÿâmi‘ah Al-Tirmidhi. Abu ‘Isa, Muhammad ibn ‘Isa Al-Sulami (209-279 HL).

• Sunan Al-Nasâ’i. Abu ‘Abdu Rahmân, Ahmad ibn ‘Ali ibn Shu‘ayb (215-303 HL).

En la rama del shiismo podemos mencionar a:

• Al-Kâfî. De Muhammad Ibn Ia´qûb Al-Kulainî (329 HL)

• Man Iâ iahduruh al-faqîh. De Muhammad Ibn ´Alî Ibn Al-Husain Ibn Bâbûaih (306-381 HL)

• At-Tahdhîh. De Muhammad Ibn ´Al-Hasan (385-460 HL)



1.2. Primeras elaboraciones del pensamiento islámico


Podríamos mencionar como la primera actividad intelectual que ocupo a los musulmanes, fue la interpretación del texto coránico. No debemos olvidar que el primer problema que se presento a la comunidad islámica fue el hecho de que la revelación se transmitió en un principio y preservo a través de la memoria; medio débil y que podría poner en peligro la integridad del mensaje coránico, razón por la cual, una de las primeras actividades fue poner por escrito la revelación del profeta; pues era evidente la necesidad de que se escribiera el generoso Corán durante la vida del profeta Muhammad (Bpd), ya que confiar únicamente en la memorización del libro sagrado no podría brindar la seguridad necesaria en cuanto al desguardo de éste. Sabemos que el número de personas instruidas en la Meca era muy restringido – Husein Yavân Arasteh nos precisa que su número era de diecisiete personas - , y sin duda tuvieron que haber jugado un papel de importancia a la hora de grabar y registrar exactamente las aleyas coránicas. Este grupo fue denominado “Kuttâb Al-Wahî” (Los escribas de la revelación).


Los escribas de la revelación.


Debemos de mencionar que además de estos, existían algunos otros que registraron para el Profeta (Bpd) los pactos, convenios y cartas; siendo probable que el nombre de alguna de estas personas haya sido incluido por error en la lista de los escribas de la revelación. Citaremos la lista de los Kuttâb Al-Wahî mencionada por Ia´qubî en su libro:
´Alî Ibn Abî Tâlib, ´Uzman Ibn ´Affân, ´Amrû Ibn Al-´Âss Ibn Umaîîâh, Mû´awîîâh Ibn Abî Sufîân, Sharhabîl Ibn Shu´bah, Ma´âdh Ibn Yabal, Zaîd Ibn Zâbit, Handzalah Ibn Rabî´, Ubaîî Ibn Ka´b, Yuhaîm Ibn Salt y Hasîn Ibn Numaîr.


Ibn Shahr Âshûb en su obra Manâqib, menciona a los escribas de la revelación de la siguiente manera:


“Imâm ´Alî (p) escribía principalmente la Revelación, también escribía otros mensajes. Ubaî Ibn Ka´b y Zaîd Ibn Zâbit escribían la Revelación. Zaîd y ´Adul-lah Ibn Arqam escribían los contratos y escrituras. Zubaîr Ibn ´Awâm y Yuhaîm Ibn Salt escribían las ayudas monetarias y limosnas. ´Uzmân, Jâlil y Abân (estos últimos hijos e Sa´îd Ibn ´Âss), Mugaîrah Ibn Shu´ba, Hasîn Ibn Numaîr. ´Alâ Ibn Hadrâmî, Sharhabîl Ibn Hasanah, Handzalah Ibn Rabî´ Asadî y ´Abdul-lah Ibn Sa´d Ibn Abî Sarh”


Los expertos no se ponen de acuerdo cual fue el número exacto de los escribas de la revelación; pues como ya lo mencionamos, muchos de los nombres de los escribas que han llegado hasta nuestros días, asumían la escritura de otros asuntos. Pero todos concuerdan que cinco personas asumían la escritura de la Revelación, siendo sus nombres: ´Alî Ibn Abî Tâlib, Ma´âdh Ibn Yabal, Ubaîî Ibn Ka´b, Zaîd Ibn Zâbit y ´Abdul-lah Ibn Mas´ûb.


Los medios de la escritura a través de los cuales se registro el Corán eran muy sencillos, siendo utilizados todo a través de lo cual fuera posible escribir. Dichos medios eran:

1) ´Usub, plural de ´asîb: la rama de una palmera a la cual le arrancaban las hojas y escribían en su parte más ancha.
2) Lijâf, plural de lajfah: pequeña piedras y las piedras en forma de delgadas láminas.
3) Riqâ´, plural de raqa´ah: las hojas de papel, árbol o piel delgada.
4) Adîm, plural de adam o udm: pedazo de piel curtida de los animales.
5) Aktâf, plural de Katia: huesos de cabello u ovejas.
6) Aqtâb, plural de qatar: tabla de madera que se utilizaba como montadura de camello.
7) Adlâ, plural de dil´: huesos planos de las costillas de los animales.
8) Harîr, tela de seda en la que a veces escribían el Corán.
9) Qarâtîs, plural de qirtâsq que significa papel .
10) Shidzâdz, un tipo de madera.



La forma en que fueron escritas las aleyas coránicas las podemos clasificar en: El registro según el orden de la revelación de las aleyas y la escritura sin observar el orden de la revelación, por orden del Profeta (Bpd).


El hecho de que un grupo en especial asumiera la escritura del Corán, no fue impedimento para que algunos de los Compañeros del Profeta (Bpd) intentasen escribir las aleyas y suras coránicas para uso personal.


Según varias fuentes se puede establecer con cierta seguridad, que al menos 4 compañeros – todos Ansâr según lo trasmitió Anas Ibn Mâlik – habrán recopilado el Corán durante la vida del Profeta.


A este respecto Abû ´Abdil-lah Zanyâni nos dice en su Tâ´rîjul Qur´ân: “Alguno de los Sahâbah recopilaron todo el Corán a lo largo de la vida del Profeta (Bpd) y algunos otros solo parte de este durante su vida, y completaron su obra después de su partida”.


Debemos llamar la atención sobre el hecho que algunos investigadores han sostenido que el término ÿam´ que aparece en la serie de dichos que se citan acerca de los recopiladores del Corán, significaría memorizar y no recopilar, debido a que dicho término también es utilizado para denominar a los memorizados del Corán “ÿummâ´ del Corán”. Lo cual es dudoso debido a que los memorizadotes en la época del Profeta (Bpd) fueron mucho más numerosos; además existen datos que avalan la posibilidad que los escritores del Corán fueran más numerosos que los mencionados, debido a que en varios hadices se estimula a la gente a recitar el Corán contemplando las escrituras, lo que demostraría que las escrituras coránicas eran ya numerosas en vida del Profeta (Bpd).


Un dato interesante es aportado por Hâkim en su obra Mustadrak en la cual nos dice: “El Corán fue recopilado tres veces y la primera recopilación fue realizada durante la vida del Profeta (Bpd)”. Este dato nos lleva a que con respecto a la recopilación del Corán en su forma actual, se han venido a formar dos bandos entre los expertos: Un grupo opina que la recopilación del Corán – en el mismo orden actual – fue realizada durante la vida del Profeta (Bpd); y el segundo la remonta a la recopilación “oficial” del Corán en forma de libro (entre dos tapas) en tiempos del primer Califa, luego del fallecimiento del Profeta (Bpd). Pero analizado el tema con detenimiento nos daremos cuenta que si bien es cierto, la escritura y elaboración de las aleyas coránicas indudablemente fueron llevadas a cabo durante la vida del Profeta (Bpd); su recopilación y ordenamiento en forma de Mus-haf fue realizada tras su muerte, como lo afirma el gran sabio ´Al-lâmah Tabâtabâ´î .


Un hecho significativo en la historia del Corán, fue la batalla de Îamâmah, pues en ella fueron martirizados más de 70 recitadores del Corán. A raíz de este hecho, surgió el temor que en nuevas batallas fallecieran el resto de los recitadores del Corán, perdiéndose a si el Corán mismo; razón por la cual, se decidió reunir las suras y aleyas en un Mus-haf. El encargado de esta misión sería Zaîd Ibn Zâbit.


Bajo el mando de Zaîd Ibn Zâbit, un grupo de entre los discípulos de los recitadores se dedico a reunir las suras y aleyas desde los alwâh (tablas), sa´af (hojas o ramas de palmera) y Katif (huesos de camello u oveja) desde la casa del Profeta (Bpd) que habían sido registradas por los escribas de la revelación y desde las manos de los discípulos de los recitadores, siendo colocadas en un solo volumen, siendo enviados ejemplares del mismo a las diferentes regiones.


Sabemos a través del historiador Ia´qûbî, que se constituyo un comité compuesto por veinticinco personas de los Ansâr, bajo la supervisión de Abû Bakr para colaborar con el trabajo de Zâid.


Ya mencionamos que además de la recopilación llevada a cabo por Zâid, hubo compañeros que recopilaron sus propios Mus-haf, siendo alguno de sus ejemplares, muy estimado por los musulmanes, gozando de una elevada posición. Fue así como la gente de distintas regiones recitaba el ejemplar más famoso existente en su región y de acuerdo a sus posibilidades. Sabemos que las ciudades de Kufah, Shâm y Basora seguían los ejemplares de ´Abdul-lah Ibn Mas´ûd, Ubaîî Ibn Ka´b y Abû Mûsâ Ash´arî respectivamente, sin embargo, rápidamente comenzaron a reproducirse numerosos ejemplares.

La escritura en su primera etapa fue muy simple e incompleta, razón por lo cual, la recitación de un Mus-haf debía ser respaldada por la memoria. En las fuentes históricas que disponemos se reportan numerosos casos de discrepancias en cuanto a la recitación del Corán, lo que motivo la búsqueda de una solución a dicha problemática.


Fue así como en la época del tercer Califa, surgió una propuesta de unificación de los Masâhif por parte de Hudhaîfah. La primera acción llevada a cabo la constitución de un comité de cuatro personas: Zaîd Ibn Zâbit, ´Abdul-lah Ibn Zubaîr, Sa´îd Ibn ´Âss y ´Abdu Arman Ibn Hâriz, las cuales debían escribir el Corán en el dialecto de Quraîsh en los casos de discrepancias con la pronunciación de Zaîd Ibn Zâbit (que no pertenecía a Quraîsh), debido a que el Corán había descendido en la lengua de Quraîsh; que era el dialecto más elocuente en dicha época. Este intento de unificar la lengua árabe, asentó los principios para el nacimiento de una gramática.


Ciencias Islámicas


Luego de la muerte del Profeta (Bpd) se originaron discrepancias en cuanto a la sucesión, lo que desembocaría principalmente en dos problemas teóricos, los cuales se establecen en torno a los conceptos de poder y de fe, de libre albedrío o de predestinación. Problemáticas que serían abordadas bajo la óptica del Corán.


Las ciencias religiosa que mayor influencia ejercerían sobre el futuro pensamiento filosófico fueron el Kalâm (teología) y el Fiqh (derecho) basadas en el principio de Tauhid (Unicidad de Dios) y de entre las ciencias auxiliares la Gramática; ciencias que en mayor o menos medida jugaron un rol de relevancia en la formación de las primeras especulaciones filosóficas.


A) El Kalâm

Es la escolástica del Islam que se caracteriza por su dialéctica racional pura que opera sobre los conceptos teológicos. El Kalâm se fue formando gradualmente a partir del primer siglo de la era islámica a medida que fue necesario subsanar de alguna manera el vació que se había creado tras el fallecimiento del Profeta (Bpd); quién era el soporte doctrinal de la revelación y el poseedor de la autoridad de la explicación del texto coránico.


Sería dudoso afirmar que los recientes conversos venidos en muchos casos de ambientes idolatras y paganos, fueran todos conscientes de lo que involucraban las enseñanzas contenidas en la revelación y en la Sunnah del Profeta. Razón por la cual, era de vital importancia la elaboración de una “doctrina” que explicará tanto el texto coránico como la Sunnah del Profeta (Bpd) en un cuerpo doctrinal coherente sobre el que argumentar las directrices encontradas en el texto revelado, convirtiéndose así en un instrumento básico que permitió la instauración de las bases intelectuales y técnicas, que cimentaron la creación de un dogma religioso que contuviera tanto la Revelación como la Sunnah; siendo además, el sustento del dogma y el corpus legal islámico.


El Kalâm aporto la argumentación teórica que permitió reflexionar y teorizar sobre los grandes temas teológicos y filosóficos del Islam; tales como: Tawhid, (Unidad de Dios); ‘Adl, (Justicia); Al-Wa‘d wa al-Wa‘id, (La promesa y la amenaza); Al-Asma’ wa al-Ahkam, (Los nombres y los juicios), o el Manzila bayna al-Manzilatayn, y Al-Amr bi al-Ma‘ruf wa al-Nahy ‘an al-Munkar, (Ordenar el bien y prohibir el mal), Yabr ûa Îjtîâr (Predestinación o libre albedrío).


Mención aparte es el tratamiento que las diferentes escuelas teológicas le han dado a los Atributos Divinos, especialmente a los Atributos Jabarî (de información); los cuales a diferencia de los Atributos positivos, negativos, de esencia y de la acción, no pueden ser inferidos por el juicio del intelecto; pues los atributos de la información, esta basados solo en el mensaje coránico. A partir de estos atributos, se podría decir que se formaron dos grandes “grupos” de escuelas teológicas; por un lado, las que se aferraban a una interpretación literal y las que interpretaban los atributos Jabarî de forma metafórica o alegórica. Surgiendo de ambas visiones, algunas escuelas que llevaron ambas postulas al extremo, como así también, algunas escuelas que desarrollaron una doctrina intermedia entre ambas interpretaciones .


Algunas escuelas teológicas:


Murji’a - Jareyies - Kabaries - Ash‘aritas - Kharijitas - Murji’as - Qadariyyas - Jabariyyas - Mu’tazilitas - Ismailies - Imamitas - Ahlut Hadiz - Ahlut Kias - Maturiries - Zeidies


B) El Fiqh (derecho)

Como todas las ciencias islámicas se basa en el Corán, en el cual es posible diferenciar, dentro del ámbito normativo explícito en el Corán, la legislación establecida para los actos de culto y religiosos y los de temática claramente legislativa. Vemos como en algunos aleyas las referencias jurídicas son incontrovertibles, siendo innecesaria una interpretación de su contenido; dichas aleyas hacen referencia a los preceptos referentes, a la oración, la limosna, las partes de la herencia, la prohibición del adulterio, la difamación, la usurpación de bienes ajenos, el homicidio, etc. Por el contrario, otras aleyas, también de connotaciones jurídicas, se nos presentan están sujetas a diferencias de interpretación, por citar algunos ejemplos, las relativas al amamantamiento, al sustento de la mujer repudiada definitivamente, etc. La diferencia entre estos dos tipos de aleyas como nos lo hace notar el Profesor Juan Martos Quesada, es que “los primeros tratan sobre creencias que nadie puede poner en duda sin arriesgarse a ser juzgado por la comunidad, mientras que los segundos son susceptibles de diferente interpretación, sin que ello conlleve necesariamente la reprobación comunitaria”.


Al analizar el texto coránico podemos darnos cuenta que a diferencia de los métodos utilizados habitualmente en los distintos sistemas jurídicos a lo largo de la historia, que se basan en una serie de prescripciones y prohibiciones comunicadas en un tono frió y desprovisto de cualquier de referencia a las nociones de temor y estímulo a favor del bien; mientras que los preceptos coránicos son comunicados con una gran carga emotiva, lo que logra suscitar en los creyentes sentimientos morales, que conllevan a la aceptación de las reglas propuestas más por la fe y el temor a Dios, que por razones de convicción.


Las diferencias del Corán con los demás textos jurídicos van aun más allá; pues mientras que estos últimos elaboran las leyes y las reglas concernientes a un solo y único precepto —de forma general—, el Corán en cambio, utiliza el sistema de repartir las reglas y leyes a través de varias suras, entre diversas aleyas; a menudo de una forma reiterativa, lo que conlleva a reforzar el llamado al cumplimiento de estas.


Sin embargo, el Corán no es un texto explicito en materias jurídicas, pues no debemos de perder de vista que es ante todo un libro de contenido religioso; razón por lo cual, el Corán indica en líneas generales la legislación, lo cual dio nacimiento junto a la Sunnah , la ciencia del Fiqh, pues queda en manos de los sabios y ulemas la tarea de comprender el sentido del texto coránico y la extracción de la legislatura, que cimentara las bases de la Sharî´ah.


El Derecho islámico se fijo en la sociedad de que era parte y se basó sobre todo en el respeto a la tradición. Esto supone un control absoluto de la religión sobre la moral colectiva e individual.


C) Gramática

Para rastrear los orígenes de la gramática árabe debemos remontarnos por lo menos a los Sirios y Persas, que tiempo antes de la revelación Coránica habían estudiado la hermenéutica de Aristóteles; que ya había sido por aquel entonces revisada y comentada por autores neoplatónicos y estoicos. Por otra parte, sabemos que a través de Ibn al-Moqaffa; el gramático Khalil conoció todo el pensamiento antiguo persa concerniente a la lógica y a la gramática.


Algunos autores como Henry Corbin, remontan los orígenes de la gramática árabe a ´Alî Ibn Abî Tâlib, constatando que ya en tiempos de Sibuyeh; quién fuera discípulo de Khalil, su obra es un sistema gramatical completo y acabado.

Las escuelas de gramática de Basora, Kufa y Túnez fueron la base del desarrollo de la gramática y literatura árabe . Siendo las dos primeras las que marcarían el futuro de la gramática como ciencia durante todo el siglo III/IX.


La escuela de Basora, desarrollo una visión del lenguaje basada en que este, es un espejo que refleja fielmente los fenómenos, los objetos y los conceptos; debiendo por esto, aplicársele las mismas leyes que se observan para el pensamiento, la naturaleza y la vida. Este sistema precisaba encasillar todo el lenguaje en categorías lógicas y racionales; analizando sus leyes y dejando en claro, que todas las excepciones y desviaciones, eran solo en un plano aparente.


La escuela de Kufa sin embargo, desarrollo una visión totalmente contraria, en donde la tradición, con toda la riqueza y diversidad que ella engloba, constituiría la principal fuente de la gramática. Por lo cual, toda forma reencontrada en la vieja lengua árabe pre-islámica y en la literatura, por el hecho de estar atestiguada su existencia, era reconocida como poseedora de un valor normativo.


La divergencia de planteamientos de ambas escuelas no era un tema menor, debido a que estos contradictorios planteamientos, afectaban la interpretación de las ciencias coránicas e incluso la interpretación de ciertos pasajes del Corán o un Hadiz.


Además, no podemos dejar de mencionar las “balanzas de las letras” de Jâbir Ibn Hayyân basada en las ciencias de las letras (Jafr); que se basaba esencialmente en la trasmutación de las raíces árabes.


D) Literatura



Para una exposición más clara, dividiremos la literatura árabe en dos periodos. El primer periodo corresponde a la época pre-islámico, se caracteriza por un sinnúmero de dialectos tribales los cuales tenían como denominador común su origen netamente autóctono, sin préstamo de culturas foráneas y con un claro sello propio, nacido quizás de la libertad que le daba el desconocer la sintaxis y las reglas propias de una lengua ya configurada.


Las primeras obras de dicho periodo, llamadas Moallaquat , surgen alrededor de los siglos VI y I/VII d.c.; siendo verdaderas antologías de los primeros poemas, conocidos como Cásidas, de corte heroico, en los cuales se ensalzaba el espíritu guerrero, libre y viril del beduino. En dichos poemas plagados de alusiones y ricas figuras literarias, ya están presente todos los recursos de la métrica árabe, que se han perpetuado hasta nuestros días: el tipo de rima, los metros que admiten 16 variantes . Las combinaciones de las silabas largas y breves, conocidas como “letras de prolongación” permiten una variedad de juegos rítmicos, cuyo mejor ejemplo están en los zejeles, pequeños poemas que permiten seis variantes.



Los Moallaquat fueron compilados por Hammad Raridja; quién se sirvió de las obras de al menos siete autores: Amr´ul Quais, Tarafa, Harith Ibn Illiya, Zoehir, Lebid, Amr Ibn Kolthum y Antar .


Los otros temas abordados por las Cásidas estuvieron compilados en los Hamaza; colecciones de poemas líricos y satíricos.


La primera obra luego de la revelación coránica es la traducción realizada por Abdallah Ibn Almocaffa del texto palhvi (persa medio) de las famosas fabulas de origen hindú Pilpay o Bidpai; más conocidas como Calila y Dimna .


1.3. Fuentes de meditación filosófica en el Islam


A partir de la muerte del Profeta (Bpd) se suceden vertiginosamente una serie de conquistas y anexiones de nuevas tierras y pueblos a la nueva nación islámica (Ummah); que a diferencias de las antiguas costumbres tribales de la península árabica, en donde el lazo de sangre y parentesco era el elemento aglutinador, tras el mensaje del Islam, lo que uniría al futuro gran imperio islámico sería la fe. Con la entrada de estos nuevos pueblos y sus culturas a la naciente nación Islámica, se produjo una asimilación de los aspectos e ideas que no estaban en conflicto con el mensaje coránico. Dicho proceso de debió en gran medida por un aparte, al énfasis que el Islam pone en la obtención y el cultivo del conocimiento; estando por ende el mundo musulmán de ese entonces, abierto a nuevas ideas que enriquecieran su visión del mundo y de Dios.


El padre Zeferino González en su estupendo trabajo Historia de la Filosofía, nos precisa: “Las provincias meridionales y occidentales del Asia, que, según las tradiciones bíblicas, presenciaron la creación primera del hombre, y la segunda creación o dispersión postdiluviana del género humano, fueron también testigos de las primeras evoluciones filosóficas, por lo mismo que fueron teatro de las primeras civilizaciones. Porque toda civilización entraña una Filosofía, bien así como toda concepción religiosa entraña una civilización en armonía con la religión que le sirve de base y norma fundamental. De aquí la existencia, desarrollo y caracteres de lo que pudiéramos llamar Filosofía oriental, y también Filosofía prehistórico-griega, en relación y armonía con la existencia, desarrollo y caracteres de las religiones varias que aparecen de una manera, ya sucesiva, ya simultánea, en diferentes regiones del Asia y del África.”


De estas llamadas filosofías orientales, nos ocuparemos en este capitulo de 3 civilizaciones: Persa, India y Judía; la filosofía; Egipcia y China, solo será tratada a través de monografías, debido a que su grado de influencia sobre el pensamiento islámico fue menor.



En primer lugar citaremos la antigua filosofía de Persia, que bebió en la más antigua de las grandes religiones de la humanidad, el Mazdeismo; por su importancia en el proceso del pensamiento islámico, al ser esta un a religión del libro y por tanto, con puntos en común con el mensaje islámico, como último eslabón del ciclo de la profecía.


Filosofías orientales



a) Persia

Cuando hablamos de Persia, hacemos mención también a las varias provincias que estuvieron bajo el dominio persa; entre ellas Sogdiana, la Margiana, la Susiana, y especialmente, la Bactriana, patria de origen de Zarathustra y foco del mazdeísmo.


Al analizar los datos históricos que poseemos, así como las afinidades lingüísticas, doctrinales - teológicas entre el Mazdeismo y las doctrinas Vedicas; es posible inferir que las enseñanzas de Zarathustra representan una reforma religiosa de la antigua religión aria contenida en los Vedas. Si bien es cierto, disponemos muy pocos datos sobre su vida; su biografía es una mezcla de realidad y míto ; pero remitiéndonos a la biografía académicamente aceptada, se menciona que era un Zator, un recitador de los antiguos cánticos sagrados arios, un sacerdote conocedor de la antigua religión aria, un Karapans.


La oposición de principios y tendencias que se observa entre el mazdeísmo y el brahmanismo, confirma y explica a la vez la ruptura entre estas dos concepciones. La primera y más importante diferenciación es la del paso del panteísmo védico a un total monoteísmo. Es necesario señalar, que a menudo se suele cometer el error en una gran cantidad de trabajos realizados por orientalistas, así como por teólogos e historiadores de exponer al mazdeismo y por ende, al mensaje de Zarathutra como una doctrina dualista.


Lo que se suele denominar como Mazdeismo, es más bien la forma tardía y degradada del Zoroastrismo Sasánida, el cual había incorporado elementos venidos de la religión dualista de los magos de la región Meda y en forma gradual retorno a las ideas panteísta de las antiguas creencias arias, volviendo a reflotar un panteón, plagado de semi-dioses, cubiertos bajo el aspectos de principios o fuerzas creativas, así como en una profusa y rica angelología. Pero dicha versión del mazdeismo, contenía muy poco del mensaje original de Zarathustra. Debemos de tener presente que tras la invasión de Alejandro el Grande a Persia y la destrucción de la capital imperial de los Aquemenides; Persepolis y de su gran biblioteca; los antiguos textos sagrados del Mazdeismo fueron destruidos casi en su totalidad. La reconstrucción de la antigua fe, que se inicio cientos de años después de estos hechos se baso en los manuscritos que se preservaron y que lograron ser traducidos .


En este capitulo nos referiremos al mazdeísmo sasánida reformado, debido a que con dicha versión del pensamiento mazdeista entro en contacto el Islam.


El rasgo más relevante de esta reforma del mazdeísmo en tiempos Sasánida, es el paso desde el concepto de un Dios Único (Ahura Mazda) a una personificación del principio del bien, denominada por su forma pehlvi Ohrmazd, enfrentada en una eterna lucha con el principio del mal, llamado Ahriman. Podemos ver a través de un análisis de los términos como el pensamiento mazdeísta involuciono, pues en los textos más antiguos que se han preservado, a este espíritu opositor o hostil se le denominaba Angra Manju, termino que designa una mala forma de pensar o de entender el mundo.


A continuación mencionaremos los dogmas en el terreno de la escatología, así como sus preceptos morales, que debieron de producir un fuerte impacto en los musulmanes, debido que dichas doctrinas estaban contenidas en el mensaje coránico: la inmortalidad del alma, la resurrección de los muertos, el juicio final, la existencia del paraíso y del infierno, la venida de un salvador al fin de los tiempos, etc.; sin mencionar además una similitud en concepciones cosmologicas y teológicas: La primera pareja humana, el puente que conduce a los creyentes al paraíso y que los pecadores son incapaces de cruzar, el encuentro post-morten con la imagen de la fe que incidirá directamente en el resultado del juicio del alma, la presencia de dos entidades angélicas que acompañan al ser humano al momento de acceder a la otra vida, etc.


Además del Avesta ya citado, debemos mencionar los libros religiosos elaborados en el periodo Sasánida en lengua pahlavi: Bundadish, texto que mezcla nociones cosmogónicas, teológica, históricas, ciencias y de jurisprudencia; el Denkart, Vendidad; además de los textos tardíos post época Sasánida elaborados en lengua persa, conocidos como Ribayat; que son una serie de recopilaciones de tradiciones.



b) India

El pensamiento religioso-filosófico de la India se pierde en la noche de los tiempos, siendo la más antigua de las grandes religiones de la humanidad. Por lo cual, la fecha de datación de sus libros sagrados es motivo de controversia y disputas a nivel académico, el único dato en el cual hay consenso, es el de su ordenación y fijación definitiva que se adjudica a Vyâsa, nombre que designa a una colectividad o “escuela” intelectual que procedió al trabajo de compilación en una fecha indeterminada del gran legado intelectual de los antiguos arios que llegaron al valle del Indo.


De dicho trabajo de compilación, provienen el Vêda , término que engloba a todos los escritos de la tradición hindú; las cuales están recopilados en cuatro textos: Rig-Vêda, Yajur-Vêda, Sâma-Vêda y Atharva-Vêda. La importancia de los Vêdas es central en el pensamiento hindú, pues sobre el se basa todo la doctrina religiosa y filosófica de la India. En los Vêdas también están contenidos los Upanishads , poemas de índole metafísico que provienen de la rica tradición oral, “vansha" que designa la filiación tradicional; los cuales son una de las bases mismas de la tradición ortodoxa. Luego tenemos el quinto Vêda, los Puranas; los cuales son una colección de poemas a través de los cuales se relatan las transformaciones y encarnaciones de las formas de la deidad; a estos le sigue el Mahâbhârata, que junto al Râmâyana forman los dos más grandes poemas épicos de la literatura sagrada India


Además de los Vêdas, existen otras colecciones de textos sagrados que difieren en importancia y en el espectro teológico-filosófico que abarcan.


Además del Vêda se derivan una serie de ciencias, las cuales se pueden dividir en los seis "Vêdângas " y los cuatro los “Upavêdas ”.


Los Vêdângas designa ciertas ciencias auxiliares del Vêda, que pueden ser comparadas a los miembros de un ser humano a través de los cuales este toma contacto con su extracorporeidad; razón de la que deriva su importancia, pues es a través de ellos, que el Vêda se conecta con el hombre y con la creación toda: Shikshâ que es la ciencia de la articulación correcta, de la pronunciación exac¬ta, que implica, el conocimiento del valor simbólico de las letras, Chhan¬das que se ocupa de la prosodia, a través de la cual, se determina la aplicación de los diferentes metros en correspondencia con las modalidades vibratorias del orden cósmico que deben ex¬presar, Vyâkarana es la gramática que se basa estrecha relación con el significado lógico del lenguaje, Nirukta que es la explicación de los términos importantes o difíciles que se encuentran en los textos védicos, Jyotisha es la astronomía y la astrología, y por último Kalpa, el conjunto de las prescripciones que se relacionan con la realización de los ritos.


Los Upavêdas están vinculados a los cuatro Vêdas porque en ellos se encuentran sus principios respectivos: Ayur-Vêda, es la medicina, unida al Rig-Vêda; Dhanur-¬Vêda, la ciencia militar, unida al Yajur-Vêda; Gândhar¬va-Vêda, la música unida al Sâma-Vêda; Stâpatya-Vêda, la mecánica y la arquitectura, unidas al Atharva-Vêda. És¬tas son, según las concepciones occidentales, artes más bien que ciencias propiamente dichas; pero el principio tradicio¬nal que se les da aquí les confiere un carácter algo dife¬rente. Naturalmente, estas enumeraciones de los Vêdângas y de los Upavêdas, no excluyen de ningún modo a las otras ciencias, que no están comprendidas en ellos pero de las cuales


b) Judía
El judaísmo es la más antigua de las religiones monoteístas, la cual esta basada en el Tanaj (Antiguo Testamento), que comprende veinticuatro libros que cuenta la historia del hombre, desde la Creación hasta la construcción del Segundo Templo; además de incluir preceptos religiosos, morales y jurídicos; filosofía, profecías y poesía, entre otros. Sus cinco primeros libros, en conjunto conocidos con el nombre de Torah , son considerados escritos por inspiración divina.



Juega también un papel importante en la práctica religiosa la tradición oral que, según las creencias fue entregada a Moisés junto con la Torá y conservada desde su época y la de los profetas. La tradición oral rige la interpretación del texto bíblico; la codificación y comentario de esta tradición ha dado origen a la Mishná, al Talmud y a un enorme cuerpo exegético, desarrollado hasta el día de hoy por los estudiosos. El compendio de estos textos forma la denominada Ley Judía o Halajá.



Los preceptos jurídicos, éticos, morales y religiosos contenidos en la Tora, junto a su explicación de la Mishná conforman el corpus jurídico principal del judaísmo. El
Talmud, como la ley judía o Halajá (camino).
Los veinticuatro libros que comprenden el Tanaj están agrupados en:
- La Tora (La Doctrina)
- Nevi´im (Libro de los Profetas)
- Ketuvim (Los Escritos)



Por otra parte, la Halajá (Ley hebrea) esta basada en ciertas obras de carácter normativo, entre ellas podemos nombrar:
- La Mishná: es una recolección de las tradiciones orales y exégesis de la Torá.


- El Talmud, formado por la Mishná y un voluminoso corpus de interpretaciones y comentarios, llamados Guemará, a los que se agregaron posteriormente las explicaciones de comentaristas medievales, entre los que destaca Rabí Shelomó Yitzjaki («Rashi», por sus iniciales en hebreo).


- El Shulján Aruj, compilación y codificación de toda la Halajá por temas.
- El Mishné Torá de Maimónides, llamado en hebreo Moshé Ben Maimón (o incluso Rambam, por sus iniciales).
Debemos mencionar además la importancia del libro fundamental de la Cábala judía: el Zóhar, libro místico escrito por el rabino Shimón Bar Yojai.



El rasgo distintivo del judaísmo es su creencia en un Dios omnisciente y omnipotente, que habría creado el universo y elegido al pueblo judío para revelarle la ley contenida en los Diez Mandamientos y las prescripciones rituales de los libros tercero y cuarto de la Tora.



1.4. Fuentes de meditación filosófica en el Islam


No debemos de perder de vista, que los pensadores que dieron forma a la filosofía islámica, formaban parte integral de la comunidad del Islam, que se engloba bajo la expresión coránica Ahl al-Kitâb ; un pueblo poseedor de un Libro sagrado; es decir, una comunidad religiosa que se funda en un libro “descendido del Cielo”. Al estar fundada en base a un Libro sagrado, este deviene en su regla de vida tanto en este mundo como en el más allá. Ante esta situación, surge una problemática que en diversos niveles siempre ha estado presente en el discurrir intelectual de los musulmanes. El problema al que nos referimos es la compresión del sentido verdadero del Libro, en este caso, el Corân.


Ante este dilema, la situación es esencialmente una situación hermenéutica, es decir, en palabras del estudioso francés Henry Corbin, una situación en la que aflora para el creyente el sentido verdadero, el cual a su vez hace verdadera su existencia. Sentido verdadero que es correlativo a la verdad del ser, que es expresado a través del término haqîqât; uno de los términos claves del vocabulario filosófico musulmán.



a) Tafsir


El Tafsîr se basa en la gramática árabe y en el propio Corán, y ha sido definido como “ la ciencia que investiga la correcta pronunciación de las palabras del Corán, sus sentidos y valores tanto cuando están aislados como en combinación, y los significados probables en la combinación, añadiendo a todo ello complementos tales como el conocimiento de la abrogación, la causa de su revelación, un relato que aclare algo que el Corán deja indeterminado, y cosas así”.



La expresión árabe Tafsîr, procede de la raíz lingüística fasa-ra, indicadora de una función aclaratoria para alguna cosa o concepto, esto es: capaz de evidenciar la integridad de un mensaje, aún desde su aspecto menos aparente; siendo la disciplina capaz de concretar lo que del Qurân se llega a comprender, de su mensaje correcto, y de las sentencias y juicios (legales y doctrinales) que de él se pueden obtener, así como de su Sabiduría”. Para Mufradât Râgib, Îsfahânî , es “el sentido adecuado para esta expresión, es la de “develación” o kashf de algo que permanece recóndito”.


Para la correcta comprensión del texto coránico era necesario una metodología específica. El Tafsîr forma parte de las Ciencias Coránicas, las cuales comprenden además, la recitación, la escritura, la inimitabilidad, las circunstancias detrás de la revelación, la abolición, la gramática coránica, los términos inusuales, las reglas religiosas, la lengua y la literatura árabe.



Los primeros exégetas fueron algunos compañeros del Profeta, como Ibn ‘Abbâs, ‘Abdullâh ibn Omar, Obayy (ibn Ka’b) y otros. En esa época la exégesis estaba confinada a la explicación de aspectos literarios de los versículos, los fundamentos de su relevancia y ocasionalmente la interpretación de un versículo con la ayuda de otro. El mismo estilo fue usado por los discípulos de los compañeros, como Mujâhid, Qatâdah, Ibn Abi Laylâ, ash-Sha’bi, as-Suddi y algunos más que vivieron durante los dos primeros siglos de la Hégira.



El Tafsîr además comprende 7 ciencias auxiliares, tales como:

- La ciencia de la lengua árabe, la lexicografía (‘ilm al-luga)
- El conocimiento de las normas que gobiernan el habla árabe en sus términos aislados y en la composición. (lugât al-‘árab)
- La ciencia de la retórica. (‘ilm al-ma‘ânî wa l-bayân wa l-badî‘)
- La concretización de lo ambiguo y el detalle de lo generalizado.
- El conocimiento de la generalización, la concretización, la universalidad, la particularización, la aplicación incondicionada, la sujeta a restricciones, los signos de la orden y de la prohibición.
- La especulación racional sobre lo posible en Dios, lo necesario y lo imposible, y el análisis de la profecía.
- La ciencia de las lecturas y fonética aplicada al Corán. (‘ilm al-qirâ’ât)



Si bien es cierto, existen diversos métodos de exégesis coránica, que surgieron a raíz del establecimiento de las diversas escuelas teológicas (’Ilmu’l-kalâm), la introducción de la filosofía (Falâsifas) en el pensamiento islámico, la aparición del sufismo (at-tasawwuf) y la gente de la tradición (Ahlut Sunnah ); a fines del siglo primero de la Hégira y que se incrementó en el tercer siglo de la Hégira durante la época abatida. A raíz de la formación de estas distintas visiones, surgieron diversas miradas interpretativas del texto coránico.



Si embargo, los métodos utilizados se pueden agrupar en dos formas de analizar el texto coránico:



a) Analizar el texto coránico, desde el punto de vista académico y filosófico, sopesando los pro y los contra con la ayuda de la filosofía, la ciencia y la lógica. Los filósofos y teólogos musulmanes.

b) Analizar el versículo con la ayuda de otro versículo, tras lo cual, se medita sobre ambos; identificando así la persona o la cosa individual por medio de los atributos y particularidades mencionados en el versículo.


Ta´wil

Como muchos términos árabes, haqîqât es una palabra con múltiples acepciones; pero en el tema que nos ocupa, designa el sentido verdadero de las revelaciones divinas; por lo cual, es a la vez su esencia; en consecuencia, su sentido espiritual. Plantearse alcanzar dicho “sentido espiritual”; conlleva que existen otros sentidos distintos a ese, sentidos que podrían devenir en una pluralidad de “lecturas” del mismo texto.


Un punto que conviene tener en mente que nos puede ayudar a entender mejor el sentido real del termino haqîqât es que el Islam, a diferencia del cristianismo, no esta basado en un hecho histórico (el pensamiento cristiano esta centrado sobre el hecho ocurrido el 1 de nuestra era; en donde la encarnación divina señala la entrada de Dios en la historia) sino de la metahistoria; con el empleo del término metahistoria no estamos haciendo alusión a un hecho post-histórico, sino trans-histórico. Este suceso, al que hacemos mención; es la interrogante formulada por Dios antes del tiempo de nuestra historia empírica, a los espíritus de los hombres antes de la formación del mundo terrestre. “No soy yo vuestro Señor” (7:71). De la respuesta primigenia de la especie humana surgió una alianza eterna; alianza que ha sido a través del curso de la historia humana actualizada por los profetas, que han sido los ejes del llamado “ciclo profético”. De las enseñanzas y palabras de los profetas se ha derivado la ley divina, la sharî´at. De este hecho ha surgido la interrogante ¿solo tiene existencia esa apariencia literal – en cuyo caso la filosofía no tiene sentido de ser en este ámbito – o existe un sentido verdadero ha comprender, la haqîqât, el sentido espiritual?.


A raíz de esta interrogante, se han constituidos los fenómenos religiosos del Islam Shi´â que influiría en el sufismo y en la filosofía islámica. A raíz de la meditación centrada en la polaridad entre sharî´at y haqîqât; se desprenderá el sentido espiritual de las revelaciones divinas, es decir, su sentido oculto, esotérico. No debemos olvidar que ya antes de nacimiento de nacimiento de Avicena, los grandes temas y léxicos de la gnosis islámica esta ya configurados en el shi´ismo ismailí.


Una particularidad del pensamiento filosófico en el Islam, es que debido que carece de conciencia histórica, y por ende, no ha tenido que afrontar los problemas surgidos de ella, posee un movimiento vertical dual; por un parte, de progresión desde el origen (mabda´) y por otro, de retorno hacia el origen (ma´âd); por la cual, las formas no son pensadas en el tiempo, sino en el espacio. A este respecto Henry Corbin nos precisa: “Sobre este eje se escalonan los sentidos de las revelaciones divinas, sentidos que corresponden a jerarquías espirituales, a niveles de universo que se abren en el umbral de la metahistoria. Ahí el pensamiento se mueve libremente, sin necesidad de atenerse a las prohibiciones de un magisterio dogmático”.


Volviendo al punto de la prefiguración en ámbitos shi´âs de los grandes temas que con posterioridad retomaran los filósofos islámicos; podemos mencionar: la afirmación de la identidad del Ángel del Conocimiento (´Aql fa´âl, la inteligencia agente) y el Ángel de la Revelación (Rûh al-Qods, el Espíritu Santo), la gnoseología de Al-Fârâbî y de Avicena sobre el conocimiento profético; la inclusión de la sabiduría de los sabios griegos en el “nicho de las luces de la profecía” y la idea de la teosofía (hikmat ilâhîya) a la cual no le podemos conferir el sentido que corrientemente le damos a los términos teología y filosofía, pues no es ni una ni la otra.


Retomando la idea de esta “sentido real” y por ende espiritual de la revelación divina, poseemos claros ejemplos al respecto, que nos permitirán comprender como la hermenéutica coránica y la meditación filosófica están predestinadas a nutrirse recíprocamente.


“No hay versículo coránico que no tenga cuatro sentidos: el exotérico (zahir), el esotérico (batin ), el limite (hadd) y el proyecto divino (mottala´). El exotérico es para la recitación oral; el esotérico es para la comprensión interior; el limite son los enunciados que determinan lo lícito y lo ilícito; el proyecto divino es lo que Dios se propone realizar en el hombre en cada versículo”.
´Alî ibn Abî Tâlib, I imam shi´â



“El libro de Dios comprende cuatro cosas: la expresión anunciada (´ibârat), la dimensión alusiva (ishârat), los sentidos ocultos, relativos la mundo suprasensible (latâ´if), y las elevadas doctrinas espirituales (haqâ´iq) . La expresión literal es para el común de los fieles (´awâmm); la dimensión alusión concierne a la elite (khawâss); los significados ocultos incumben a los amigos de Dios (awliyâ); las elevadas doctrinas espirituales pertenecen a los profetas (anbiyâ, plural de nabî).”

Ya´far al-Saqid, VI imam shi´â



En estos cuatro sentidos aludidos podemos ver como obedecen a una distinción de jerarquía espiritual existente entre los hombres. Esta idea de la Verdad interior de la revelación, la podemos rastrear hasta el mismo profeta de Islam, a través de un hadiz tradicional:


“El Corân tiene una apariencia interior y una profundidad oculta, un sentido exotérico y otro esotérico, a su vez, este sentido esotérico encierra otro sentido esotérico (esta profundidad tiene otra profundidad, a la manera de las esferas celestes, que se encajan unas en otras); así sucesivamente, hasta siete sentidos esotéricos”.

Profeta Muhammad (Bpd)


Como podemos ver la idea de lo esotérico esta en los orígenes mismos del Islam, idea que conllevará a la interiorización mística y a la especulación filosófica. Ya en tiempos muy tempranos de la historia del Islam, podemos ver esfuerzos en esta línea a través comentarios coránicos que además de dedicarse al tafsir incluye el ta´wîl místico. Uno de los primeros comentarios coránicos que incluían el ta´wîl, se lo debemos a Rashîdoddîn Maybolî. Otro importante obra de exégesis espiritual fue compuesta por ´Abdorrazâq Kâshânî, quién fuera uno de los insignes representantes de la escuela de Ibn ´Arabî; y hemos dejado para el último el gran comentario del místico Rûzbehân Baqli Shîrâzi.


Además de estos 3 importantes tratados de exégesis espiritual del Sagrado Corán, debemos de destacar los numerosos comentarios de filósofos y místicos que se centraron en este sentido real y por ende, espiritual (haqîqat) de una sura o aleya. Formando el conjunto una literatura considerable. A modo de ejemplo, citaremos algunos de los ejemplos más típicos: Mullâ Sadrâ, Sayyed Ahmad ´Alawî, Mîr Dâmâd, Abûl´l-Hasan ´Amilî Ispahán, entre otros.


Por lo antes dicho, queda manifiesto el por qué la exégesis espiritual del Sagrado Corán debe de figurar como una de las fuentes de la meditación filosófica en el Islam.



Extraído de: Introducción a la Historia de la Filosofia en el Mundo Musulmán
Mustafa ´Alî



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NOTAS


1) Término árabe con el cual se designa a los tiempos pre-islámicos, conocidos en la tradición islámica como “tiempos de la ignorancia”.
2) Los héroes.
3) La ciudad de la Meca gozaba desde los tiempos antiguos de un privilegio especial que la convertía en el centro de la península arábica. Era la sede de la Ka´abah, el primer templo al Dios Único que las tradiciones remontan a Adán, y que fuera reedificado por Abraham e Ismael (p) su hijo. No obstante la pura tradición monoteísta de Abraham (p) había sido oscurecida con el paso de los siglos y el templo de la Ka´abah se hallaba repleto de variados ídolos a quienes rendían culto las distintas tribus árabes.
4) Su traducción literal es pequeños tiburones.
5) Literalmente “cubo”. Designa al antiguo templo de la Meca, el templo más antiguo de la humanidad. Los Quraysh obtuvieron el privilegio de gobernar la Meca y ser el guardián de la Cava, alrededor de cuatrocientos años después de Cristo, cuando un hombre de Quraysh llamado Qusayy se casó con una hija de Hulayl, que entonces era el jefe de los Juzaah. Hulayl prefería su yerno a sus propios hijos porque Qusayy destacaba entre los árabes de su tiempo; y al morir Hulayl, después de una violenta batalla que concluyó en arbitraje, se acordó que Qusayy debía de hacerse del gobierno de la Meca.
6) Término que designa tanto a toda la región de Siria y Palestina, como específicamente a la ciudad de Damasco, tradicional sede de su gobierno. En tiempos del Profeta (Bpd) Sham era el asentamiento de la más antigua cultura y civilización alcanzada por los árabes y pueblos emparentados.
7) Hija de Juwaylid, del clan de Asad. Era prima carnal de Waraqah, el cristiano, y de su hermana Qutaylah y, al igual que ellos, prima lejana de los hijos de Hashim. Ya había estado casada dos veces, y desde la muerte de su segundo marido había sido su costumbre contratar a un hombre para que comerciase en su nombre.
8) Su hija Fatima fue la más amada por el Profeta; quién con posterioridad se casaría con ´Alî Ibn Abî Tâlib, primo del Mensajero de Dios.
9) El hermano de Abu Talib, Abu Lahab quién era el más rico de los hermanos, se encargo de la crianza de Yafar, unos diez años mayor que ´Alî.
10) El inicio de la Bi´zah (misión profética) se inicio con el descenso de la Sura Al-´Alaq , en la cueva de Hirâ; pero no existen consenso acerca de la fecha en que esto ocurrió, dividiéndose las opiniones en dos bandos. Una de las fechas dadas para el inicio de la misión profética es el 27 de Rayab, mientras que el otro bando sostiene que fue en el mes de Ramadán.
11) Existen diferentes formas de revelaciones, las que se producen por distintas vías:
a) Al corazón del Enviado.
b) A través de un árbol o una montaña (como en el caso de Musa (p)).
c) A través de los sueños.
d) A través de un ángel. El Profeta Muhammad (Bpd); recibió la Revelación por el último de los medios señalados.
12) Hombre que profesaba el monoteísmo antes de las Revelaciones. El haanif renunciaba al politeísmo existente y buscaba a su único dios. Abraham es el haanif por excelencia, que cree en el único dios antes incluso de recibir la Revelación.
13) El primer converso al Islam fue su esposa Jadiya, siguiéndole su primo ´Ali cuando aun era un niño y Abu Bakr, el futuro primer califa.
14) La Historia del Profeta del Islam, Muhammad, Ayatullah Yafar Suban, cap. XV, p. 105.
15) En árabe Qu´rân viene del término qara´a, que significa recitar, leer. Es la gran recitación o lectura.
16) EL Corán, Miraguano Ediciones.
17) Palabra árabe que designa a los capítulos del sagrado Corán.
18) Ta´rîrj Al- Qu´rân, p.9.
19) Designa la tradición o costumbre profética, así como el conjunto de los dichos o hadices del Enviado de Dios (Bpd).
20) Una de las partes constituyentes de un Hadîz, que comprende la cadena de los nombres de las personas a través de las cuales se trasmitió el dicho profético.
21) Una de las partes constituyentes de un Hadîz, que comprende el texto propiamente dicho.
22) No mencionamos en este trabajo, otro tipo de clasificaciones de hadices, por escapar al objetivo de este estudio.
23) Designa la tradición o costumbre profética, así como el conjunto de los dichos o hadices del Enviado de Dios (Bpd).
24) Debemos hacer notar que en el shi´ismo no existen libros considerados Sahih; sino que cada Hadiz independientemente en que colección estén recopilados es analizado en forma independiente.
25) Libro sagrado de los musulmanes; el término deriva de “qarana” (plural de “qarînah” – unida junto con – y su significado es “el que sus aleyas son parecidas unas a otras”. Literalmente, "recitación".
26) Lecciones sobre las Ciencias Coránicas, parte IV, Cap. I, pág. 154
27) Los árabes de esa época conocían el papel, que era fabricado en la India y traído hasta el Yemen, por medio de las caravanas comerciales llegaba a Shâm.
28) Término que proviene del árabe “aiát” y que designa generalmente a los versículos del Sagrado Corán.
29) Término árabe que significa “ayudante”, “socorredor”, fue la denominación que recibieron los musulmanes de la ciudad de Iazrib (Medina) que acogieron al Profeta y lo secundaron tras su emigración de la Meca.
30) Sahîh Al-Bujâri, t.9, p.47
31) Término que designa a los compañeros del Profeta (Bpd).
32) Dichos o narración proféticas.
35) Conjunto de páginas entre dos tapas.
36) Al-Mîzân, t.12, p.120.
37) Ejemplares.
38) Dicha denominación se relaciona con “informar” debido a que su única fuente que los testimonia es la transmisión textual de estos.
39) Este tema será abordado con más detenimiento en el Capitulo 3 que esta dedicado a la Teología Islámica.
49) El Corán como fuente de derecho en el Islam, p. 336.
50) Designa la tradición o costumbre profética, así como el conjunto de los dichos o hadices del Enviado de Dios (Bpd).
51) La lengua árabe forma parte del grupo de las lenguas semíticas en su rama meridional-central; el árabe está relacionado con el hebreo que se habla en Israel, el amárico o etíope, que se habla en Etiopía, así como con las antiguas lenguas semíticas.
52) El árabe antiguo se puede dividir en dos dialectos principales: el Himarita y el Quraishta; este último término por imponerse luego del descenso del Corán en dicha lengua; convirtiéndose en un idioma escrito y literario.
53) También conocidos como Modsahabat; su traducción literal es “suspendidos o de gran valor”, término que proviene de una hermosa leyenda que inspiraba respeto y admiración entre las gentes.
54) Largo, prolongado, extendido, exuberante, perfecto, vibrante, tembloroso, corriente, rápido, oscilante, ligero, semi-continuo, mutilado, seccionado de aproximación y continuo.
55) Algunos investigadores agregan a esta lista dos poetas más: Nabigha y Ascha.
56) Existe una versión en español que fue publicada bajo el titulo “El cuenta cuentos persas”.
57) Historia de la Filosofía, 1878.
58) A raíz de esto, algunos estudiosos han postulado que el fundador del Mazdeismo nunca existió, aunque dicha opinión es más bien la excepción que la regla en el mundo académico. A este respecto consultar el trabajo del Profesor Alberto Cantera, ¿ Pero hablo Zarathustra?, breve historia de un mito continuamente reinventado.
59) Magu-paiti
60) Según los estudiosos, el contenido actual del Avesta, que data del tiempo del imperio Sasánida, solo representaría una 1/3 parte del Avesta original.
61) El Avesta fue escrito originalmente en una antigua lengua aria, estrechamente emparentada con la lengua védica, que los estudiosos la suelen denominar Avestan o Gathico. En la época Sasánida en la cual se hablaba una forma media del persa, llamada pahlavi; el avestan ya era una lengua casi muerta, razón por la cual, las traducciones de las antiguas doctrinas zoroastrianas poseen un margen de error y duda con respecto a como nos han llegado.
62) Transliteración literal del termino Ahriman.
63) Al origen del Vêda se le llama "apaurusheya", es decir, "no humano":
64) Término que significa según Rene Guenon, como la a raíz vid, de donde derivan Vêda y vidyâ, significa a la vez «ver» (en latín videre) y «saber» ; la vista se toma como símbolo del conocimiento, del cual es el instrumento principal en el orden sensible; y este simbolismo se transporta hasta el orden intelectual puro, donde el conocimiento se compara a una «visión interior», así como lo indica el empleo de palabras como la de «intuición» por ejemplo.
65) Término que significa "El fin de los Vedas", en el doble sentido de "última parte" y "significado último" y también como atmavidya doctrina del conocimiento del verdadero "yo" o "esencia espiritual" o como advaita, "Nodualidad" término que, al tiempo que niega la dualidad, no hace afirmaciones acerca de la naturaleza de la unidad y que no implica nada parecido a nuestros monismos o panteísmos.
66) Término que significa literalmente "miembro del Vêda".
67) Palabra que designa los conocimientos de orden inferior.
68) También llamado Pentateuco.
69) Los pueblos del libro según la visión de Islam son propiamente los judíos, los cristianos y los musulmanes; mención aparte son los zoroastrianos que a lo largo de la historia han sido incluidos en dicha categoría de forma intermitente y los sabeos de Harrán, que ha corrido una suerte Mens afortunada.
70) A la exégesis tradicional del Corán. Tafsîr significa comentario, explicación, y mufássir es el comentarista del Corán, el experto en exégesis.
71) Autoridad en la semántica coránica.
72) La “gente de la tradición”, la cual pensaba que la salvación dependía de la creencia en los sentidos aparentes del Corán y la tradición, sin que haga falta ningún tipo de estudio académico. Lo más que admitían era investigar el valor literario de las palabras.
73) Sobre los términos zâhir y batin consultar: “El esoterismo islámico” de Rene Guenon, en el área de textos anexos del capitulo.
74) Para comprender más el sentido de ´ibârat, ishârat, latâ´if y haqâ´iq, recomendamos consultar el trabajo centrado en “Los Nombres de Dios en la obra de Muhyt Al-Din Ibn ´Arabt, en el área de textos anexos del capitulo.
75) La exégesis literal. Sentido estricto de la palabra, la exégesis literal. Su punto de referencia son las ciencias islámicas canónicas.
76) La exégesis espiritual. Etimológicamente reconducir, devolver una cosa a su origen. Es una ciencia que se mueve en una ámbito espiritual. Sentido estricto de la palabra, la exégesis literal.

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