Gobierno de Arabia Saudita, un pilar de los opositores armados en Siria


Por Luis Brizuela Brínguez *
Imagen activaDamasco (PL) Un ex alto funcionario saudí exigió a la comunidad internacional armar a los grupos mercenarios que operan en Siria, lo cual confirma el antagonismo de Riad con Damasco y sus abiertos esfuerzos para derrocar al gobierno del presidente Bashar Al Assad.
El exjefe de la Inteligencia de Arabia Saudita, Turki al-Faisal, planteó el 25 de enero en Davos, Suiza, en el Foro Económico Mundial, que la denominada oposición siria "requiere ahora medios sofisticados capaces de derribar aviones y destruir tanques a largas distancias".

Sería un terrible error no enviar esas armas, consideró el miembro de la familia real saudí, quien en estos momentos dirige el Centro de Investigación y Estudios Islámicos Rey Faisal en su país.

Líderes políticos y empresariales de varias partes del mundo escucharon a Al Faisal defender tales propuestas con el objetivo de "nivelar el campo de juego", según sus palabras, reportó el diario Saudi Gazette.

La mayoría de las armas de los irregulares provienen de los ataques a los arsenales militares y de los desertores del Ejército cuando se
incorporan a sus filas, aseguró.

Urge enviar armamento sofisticado y de alto nivel que pueda derribar aviones y destruir los blindados del Ejército Árabe Sirio, que hoy no está llegando, dijo.

Con estas palabras reconoció de manera indirecta que el conflicto en este país es en gran parte una construcción artificial alentada y financiada por potencias extranjeras.

Un reporte de la televisión estatal aquí comentó que tal solicitud constituye una flagrante violación de la soberanía siria por parte de Arabia Saudita y los países del golfo Pérsico.

Apoyar y armar a los grupos terroristas que operan en nuestro país solo servirá para sembrar el caos, la muerte, la destrucción y el sabotaje entre la población civil, argumentó la televisora.

En los últimos meses, numerosos reportes de prensa e informaciones de inteligencia desclasificadas revelaron los estrechos nexos de Riad, al igual que de Doha y Ankara, entre otros, en la organización, armamento y financiación de los grupos mercenarios que operan en esta nación levantina.

Arabia Saudita y Catar son partes básicas de la guerra que pretende incendiar Siria, así como los principales financiadores del denominado Ejército Libre Sirio, aseguró a inicios de enero el reconocido escritor y periodista francés Thierry Meyssan, en una entrevista exclusiva al canal al-Mayadeen.

Remarcó que tras la crisis de violencia en la nación del Medio Oriente subyace un sistema logístico-militar integral pagado por ambos países del Golfo, el cual se vale de redes israelíes para armar a los insurgentes y utiliza personal de la OTAN para entrenarlos.

Ello lo confirma el reciente decomiso de un aparato de transferencia de información de la Alianza noratlántica en manos de los irregulares, el cual permitía conocer vía satélite los lugares donde se concentran las unidades del Ejército Árabe Sirio, para luego atacarlas, explicó el también fundador de la Red Voltaire.

Cabe destacar que el llamado Ejército Libre Sirio (ELS), la principal fuerza armada que combate contra el gobierno, está integrado en un porcentaje significativo, según estudios, por grupos islamistas radicales como el Frente Al Nousra, filial de la organización Al Qaeda en este país.

Días atrás, el boletín francés Intelligence Online, especializado en

Asuntos Estratégicos, develó que los servicios de Inteligencia de Arabia

Saudita se encuentran implicados en la formación de Al Nousra.

El medio noticioso señaló que la inteligencia saudita apadrinó el

surgimiento de la entidad que planea establecer un Califato en Siria mediante la imposición de la Sharia o Ley Islámica con el objetivo de imponer los valores más ortodoxos de la religión.

De acuerdo con el boletín publicado en París, la inteligencia saudita encabezada por Bandar bin Sultan bin Abdul Aziz Al Saud aprovechó sus amplios contactos con los movimientos armados en Irak para

ayudar a crear el Frente Al Nousra. Gracias a dicha financiación y el apoyo de aliados en Líbano, la organización yihadista -que convoca a una Guerra Santa-, armó con rapidez sus fuerzas para atacar a las tropas del Ejército Árabe Sirio, precisó la fuente.

La experiencia en los atentados suicidas en territorio iraquí permitió dirigir golpes contra objetivos en Siria, aclaró.

El mismo boletín citó la existencia de un documento donde se plasma la decisión de Riad de liberar a cientos de terroristas y criminales condenados a muerte por contrabando de drogas, asesinatos y violaciones, bajo la condición de ir a Siria y afiliarse al ELS y el Frente Al Nousra.

La organización extremista se ha atribuido la mayoría de los más mortales coches bomba y atentados suicidas ocurridos a lo largo del territorio sirio, el más reciente de los cuales mató a 32 personas en la ciudad de Salamiyyeh, en el centro del país, según reconoció la propia organización.

Recientemente, el Departamento de Estado de Estados Unidos la incluyó dentro de la lista de organizaciones terroristas sujetas a sanciones si bien Washington, al respaldar las acciones del ELS en contra del gobierno del presidente Bashar Al Assad, apoya de manera indirecta a quienes alega combatir.

Lo anterior demuestra que lejos de contribuir a fomentar "la libertad" y la "seguridad" en Siria, como asegura, el gobierno saudí apadrina a uno de los actores más letales y extremistas, causantes de grandes sufrimientos y muerte al pueblo sirio.

*Corresponsal de Prensa Latina en Siria.